domingo, 22 de julio de 2012

1990 - Tercer Premio Certamen Miguel Hernández de poesía


Agoniza en medio de ninguna parte
Una sonrisa quebrada por la amargura
La vieja muñeca pálida y solitaria
Llora con las lágrimas del último adiós
Sus manos de ángel, que antes soñaron crear arte
O intentaron alegres agarrar la luna
Se aferran a algo que ni entonces existía.
Vivió su presente sin casi preocupación
Pero el futuro la desgarra sin piedad
Su vestido blanco bordado en contaminación
Manchones de oscuras sombras negras la vestían
Pero ya no podría salir de esa duna
Que la deshacía en fantasmas de melancolía
Su aliento de muerte envenena el aire
Su llanto de dolor hiela el corazón
Y el puñal de su leve existencia destruida
Atormenta la esencia de una nueva alma


2 comentarios:

  1. Sera posible, si tenemos una poetisa genial y no lo sabíamos. jamas pierdas tu capacidad de escribir, sea productivo o no, pues es una parte de ti muyyyyyyyyyyyyy grande.

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  2. hay que vergënza, Diosa, como me cuesta aceptar un cumplido.
    Gracias

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